Despilfarro

Informa el Ministerio de Sanidad que han sobrado 35 millones de vacunas para la gripe. Están pagadas y sobran. En otro área, los Presupuestos del Estado se equivocan al sumar en 250 millones de euros de más.
Todo ese dinero es de los contribuyentes. ¿Quién asumirá la responsabilidad en el Ministerio de Sanidad? ¿Quién enseñará a sumar a los que elaboran los Presupuestos del Estado? ¿Cuándo dejarán las instituciones públicas de desangrar la débil economía de los españoles?

Ojo con las inspecciones

Varios pequeños empresarios están recibiendo la visita de múltiples inspecciones del ayuntamiento que les multan por esto, aquello y lo de más allá. Los más avispados se van al ayuntamiento y preguntan por la normativa al respecto, comprobando que las multas por "papeleras de material inadecuado" o "suelo excesivamente antiguo", no se lo pierdan 3.000 euros de multa, son inventadas y que la normativa no dice nada al respecto. Así que ya lo saben, cuando les multen pregunten, no al multador evidentemente, por la normativa al respecto que se evitarán el pago oneroso en la mayoría de los casos. El ayuntamiento está gastando mucho, en auténticas tonterías y en gastos de sus dirigentes, y necesita dinero que siempre saca del mismo sitio: de nuestros bolsillos, aunque sea sin razón y con multas inventadas.

Destrucción del Patrimonio Histórico

Ayer supe anonadado la inminente destrucción de piezas únicas, con un valor histórico muy notable, procedentes de los prototipos, modelos experimentales y colección técnica de CETME y Santa Bárbara. Varios amantes de la Historia han realizado en los dos últimos meses diversas gestiones con quienes están a cargo de estos asuntos en el Museo del Ejército, el de Infantería y el Servicio Histórico Militar, sin visos de mucho éxito para evitar la catástrofe de la destrucción del patrimonio que ahora tratamos.
El problema es la destrucción del patrimonio de piezas de relevancia técnica, histórica e incluso de valor venal de prototipos de armas únicos en el mundo. ¿No los quieren? Que los vendan a coleccionistas u otros museos particulares o estatales, o mediante subasta, en Europa y Estados Unidos en precios que pueden encontrarse entre los 6.000 y los 20.000 Euros por pieza.
Si no los quieren, que los vendan pero no los destruyan porque son ejemplares únicos en el mundo.