Alberto Ruiz-Gallardón continúa exprimiendo a los madrileños. Antes fueron la brutal subida de la tasa de basuras y de otros impuestos municipales. Ahora el alcalde de Madrid impone una nueva tasa, diciendo que es para sufragar el servicio de bomberos.
Hasta 2004, el Ayuntamiento de Madrid cobraba entre 30 y 80 euros por los servicios prestados por los bomberos.
La medida entrará en vigor a partir del 1 de enero y recaerá sobre los propietarios de inmuebles si éstos no tienen suscrita una póliza de seguros contra incendios. El ayuntamiento cobrará ese gasto a las compañías de seguros que, a su vez, se lo harán pagar a los vecinos. En el cálculo de la cuantía se tendrá en cuenta el valor catastral que figura en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles, informa el diario Expansión. Valor catastral que también subió el alcalde, ávido de recaudar.
En los presupuestos de 2011, el servicio de bomberos supone un coste de 95,14 millones de euros para el Ayuntamiento, una cantidad que también pagarán los ciudadanos. Fuentes municipales explicaron que la modificación permitirá al Ayuntamiento dedicar lo recaudado no solo a inversiones como la ley exigía hasta ahora debido a la forma especial en la que se recaudaba esta cuantía, sino a otros apartados. ¿Acaso para el coche ecologista que luce ahora el alcalde tras esconder sus coches municipales de lujo?
Gallardón ya empezó en el año 2000, cuando era presidente de la Comunidad de Madrid. Entonces se inventó este tributo, obligando a todos los municipios madrileños de más de 20.000 habitantes a pagar una nueva tasa. En teoría, los ingresos iban entonces destinados a la "mejora" de los parques de bomberos existentes, algo que Gallardón ha olvidado mencionar en el texto del nuevo impuesto.